De la comunicación en la pareja

Imagen: María Andreina Tovar. Derechos Reservados. 2016.

De la vida en pareja habremos leído y escuchado tantos relatos, anécdotas, experiencias, consejos. Pero sin duda, no es no sino tu propia vivencia la que te da las respuestas para saber cómo enfrentar cada situación. 

Cada persona es distinta, única, con valores y criterios indeformables. Por más que lo intentemos, jamás podremos cambiar al otro si no es su deseo. 

En su lugar, podemos manejar nuestra actitud para evitar que ciertos comportamientos del ser amado nos afecten, recordando que la aceptación del otro con sus virtudes y defectos es la mejor demostración de amor.

A veces por ejemplo, es mejor obviar algunos detalles si sabemos que conversar al respecto va a generar una discusión o situación de tensión. 

Especialmente para las mujeres esto es sumamente difícil, pero simplemente en ocasiones es preferible tener paz que tener razón.

Por ende, antes de iniciar un reclamo o expresar alguna insatisfacción hacia tu pareja debes preguntarte a ti mismo si ello te llevará a obtener los resultados que deseas o sólo originará un mal momento donde ambos podrían resultar heridos.

Sólo tú conoces las crónicas de tu vida en pareja y las reacciones que se pueden presentar ante determinadas situaciones. Por eso, siempre que exista el afecto y el respeto mutuo, la solidaridad y la comprensión, la comunicación sana y cordial, evita crear conflictos y discusiones con la persona que amas, especialmente en momentos de agotamiento o cansancio, pues te irás a la cama estresado/a con una sensación de vacío y desilusión. 

Tampoco empañes los momentos agradables con reclamos que no dijiste en su ocasión. Si deseamos una relación sana con visión de futuro, debemos practicar constantemente los principios de la comunicación asertiva, estableciendo límites en los tiempos adecuados, expresando de forma consciente pensamientos y sentimientos sin menoscabar los derechos personales del otro y manifestando de forma empática la admiración y cariño por tu compañero/a de vida.

Disfruta al máximo de la compañía de tu pareja y de esa sensación de plenitud cuando están juntos, reforzando actitudes positivas como las caricias, los besos, los abrazos, las palabras de agradecimiento o la admisión de un error. Como reza en el libro "El arte de la guerra" del general chino Sun Tzu "la mejor victoria es vencer sin combatir".